EXCAVACIÓN PARA UNA PISCINAS
Las piscinas generalmente han sido proyectadas para enterrarla en el terreno, por lo tanto habrá que excavar, ahondando y extrayendo la tierra que sobre hasta llegar a la profundidad que se precise.
Para una piscina de fondo plano, la zanja estará terminada al llegar a este punto y podrá empezarse a construir. En el supuesto de que se trate de una piscina en rampa o de plano inclinado, se entiende que se comenzará a cavar simultáneamente por ambos extremos del perímetro replanteado, alcanzando en cada una de las dos fosas la profundidad correspondiente, esto es, la máxima y la mínima de la piscina, y se terminará la operación excavando el resto de la zanja, cuyo plano inclinado relacionará entre sí las anteriores honduras.